Empezamos con éste:

Se trata de estirado, levantar el pubis vértebra por vértebra (esto es importante, para articular toda la columna), y, una vez estás alineado con la espalda recta, levantar una pierna como en la foto, aguantar, y luego la otra. Todo esto sin perder la posición, sin que se te vaya bajando el culete (cosa muy difícil) y con las reglas que ya os expliqué de mantener el centro fuerte y la respiración continua.
Eso es otra, cuando estás intentando mantener estas posiciones y hacerlo todo correctamente, muchas veces una se concentra tanto que se te olvida respirar… y hasta que no estás color morado Semana Santa y empiezas a notar como que te falta algo, que tienes así como un desasosiego mu grande, o hasta que una vocecilla en tu interior te dice “¿que no ves que te estás ahogando pardilla?”, no te da por inspirar. Entonces es cuando toda la posición se te desmonta, se te baja el culete, se te tuerce la pierna, empiezas a temblar y te caes. Ups! Si es que tantas cosas a la vez no se puede!
Y ahora vamos con otro:

Ahora se trata de mantener el cuerpo alineado aguantándote con los brazos y los pies. Igual que el caso anterior, cuando ya estás en la posición, has de levantar primero una pierna y luego otra (has de quedarte unos segundos con la pierna arriba, eh? No me hagáis trampas). Y esto, que igual parece sencillo a simple vista, es mi cruz… con este ejercicio me dan unas rampas en los gemelos tremendas! Y que malas son las rampas! El primer día no podía levantar las piernas, fui incapaz, pero ahora ya me suben (tampoco para tirar cohetes…).
Y ayer me puse muy contenta porque hicimos un ejercicio de nivel avanzado y me salió! Se trataba de, estirada en el suelo, levantar las piernas a unos 45 grados y, sin moverlas, ir subiendo el tronco hasta quedarse en equilibrio así:

Aún tengo que hacerlo mejor, porque no aguanté mucho tiempo, pero la mayoría es que ni pudieron subir; aguantar el peso de las piernas es muy chungo y los abdominales pican que no veas, pero mi profe se sorprendió bastante y me dijo que ya tengo un centro muy fuerte. :D
Cambiando de tema, este mes de junio tengo 3 y posiblemente 4 actuaciones, entre benéficas y fines de cursos varios, así que estoy machacando un montón, ensayo casi todos los días y creo que mi cuerpo se está resintiendo… :(
Mi punto débil son las lumbares y es una zona que con la danza oriental se lesiona a menudo porque, no nos engañemos, los pasos son muy bonitos, espectaculares muchas veces, pero aunque intentes hacerlos correctamente para no hacerte daño, con el tiempo te resientes.

Por eso os decía que estoy hecha un Cristo, pero… sarna con gusto no pica, o eso dicen… Yo por si las moscas, voy a hacer bondad.